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| Para algunos, Guillermo Ochoa defraudó www.clubamerica.com.mx |
El Coliseo de Oakland y el Estadio Qualcomm de San Diego fueron testigos de un auténtico tsunami de aficionados sedientos de ver ese hermoso deporte que se juega con un balón redondo y no ovalado.
Estos recintos históricos, que han sido testigos de grandes batallas del futbol americano y que fueron casa de legendarios mariscales de campo como Jim Plunkett y Dan Fouts, fueron invadidos por los fanáticos aztecas que vibraron con el apogeo de Javier “Chicharito” Hernández y la debacle de Guillermo Ochoa.
México derrotó 3-1 a Paraguay el Sábado pasado ante más de 48 mil espectadores que abarrotaron la guarida de los Raiders en el Área de la Bahía. El “Chicharito” lució en grande con doblete de goles en el primer tiempo y fue despedido con emotiva ovación cuando fue sustituido al minuto 64 por Aldo de Nigris.
La Selección Mexicana se presentó tres días después en la casa de los Cargadores de San Diego, que lució graderías colmadas por más 60 mil asistentes, para lograr un empate a uno ante su similar de Venezuela, en una noche triste para el arquero Guillermo Ochoa.
Jose Manuel de la Torre probó muchos jugadores y practicó con formaciones diferentes en ambos cotejos para ir definiendo cual será el esquema mas adecuado para afrontar los próximos compromisos del Tricolor, en especial la Copa Oro en Estados Unidos.
Creo que el balance general de ambos duelos es positivo. México jugó un excelente primer tiempo ante Paraguay mientras que en el suplemento dejó de hacer bien las cosas, tal vez por verse arriba en el marcador y cuando llegaron los cambios el conjunto nomás no se pudo asentar permitiendo el gol del descuento de los guaraníes al 86.
Contra Venezuela, el “Chepo” dejó a Antonio Naelson en la banca y mandó a Giovani Dos Santos de armador, cosa que no cumplió del todo, ya que el jugador del Racing de Santander se colgaba más a su derecha, por lo que del 4-4-1-1 que funcionó muy bien contra Paraguay con “Sinha” como enganche natural, se pasó al 4-4-2 con “Gio” y “Chicharito” de puntas.
Los equipos se fueron al descanso sin anotaciones. Para la parte complementaria, el ataque mexicano mejoró sustancialmente cuando el estratega mexicano mando a la cancha a Carlos Vela y Aldo de Nigris.
De Nigris tuvo la difícil responsabilidad de sustituir al “Chicharito” –sensación del Manchester United y de la Selección Azteca–, y no defraudó. Al minuto 58 se “puso guapo” al inaugurar el marcador en una jugada de mucha fuerza dentro del área chica donde logró superar a su marcador para estrenarse como goleador en el Tri. Me da mucho gusto por este talentoso muchacho que merece una oportunidad, luego de perderse el pasado mundial por una lesión.
Al que le “fue como en feria” fue al arquero Guillermo Ochoa, quien erró una salida por lo alto que permitió a los venezolanos igualar el marcador a cuatro minutos del final. Aunque la marca de la defensa mexicana fue fatal, parte del error se le puede atribuir a “Memo”, quien precisamente ha cargado esa losa tan pesada de ser cuestionado por sus errores –o deficiencias– en las últimas convocatorias al Tricolor.
De hecho, por esos problemas se quedó en la banca de Sudáfrica 2010, cuando todos pensábamos que sería el titular indiscutible en el mundial africano. Ochoa es un gran portero, salva más de las que entran, sin embargo, creo que los aficionados y los medios le cargan demasiado la mano.
Hugo Torres es columnista de futbol de La Estrella de Tucsón, semanario en español del diario estadounidense Arizona Daily Star. Contáctelo al e-mail: detacosypatadas@azstarnet.com o síguelo en twitter.com/detacosypatadas
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