Tic, tac, tic, tac, marca el Big Ben de Londres, y el que no se apure, no llegará a tiempo a la cita Olímpica en la ciudad donde la puntualidad es uno de los valores más importantes de su sociedad. Y ni qué decir de costumbres como la famosa hora del té, donde los ingleses disfrutan la bebida en un acto casi casi religioso, después de las largas jornadas de trabajo.
Pues así cómo esos hábitos que tienen tan marcados los británicos, la Selección Mexicana debería tener la obligación de conseguir su boleto a Juegos Olímpicos cada cuatro años, sobre todo al encontrarse en una Confederación donde los rivales suelen ser infinitamente inferiores.
Sin embargo, esta costumbre de clasificar se ha ido olvidando. Nuestros jóvenes futbolistas no sólo no progresan a pasos agigantados, sino que han permitido que sus rivales los superen.
Y si no me cree, pregúntele a Hugo Sánchez, quien siendo director técnico de la Selección Mayor, tomó las riendas de la Olímpica y la llevó al rotundo fracaso cuando se quedó a la orilla de asistir a Beijing 2008.
En aquella ocasión los pupilos del “Pentapichichi” hicieron un preolímpico para el olvido y quedaron eliminados de semifinales al terminar en tercer lugar de su grupo con cuatro puntos, mismas unidades que Canadá, quienes los superaron por la diferencia de goles.
En su primer compromiso México empató con los canadienses, siguiendo una dolorosísima derrota ante Guatemala, país que a la postre terminaría líder del grupo. Para su tercer duelo, los dirigidos por el “Niño de Oro” tenían que ganarle por cinco goles a los haitianos.
Y aunque México goleó por 5-1 a los isleños esa noche fatídica en Carson, California, se quedó corto por una anotación para superar a los canadienses.
Lo bochornoso fue que en todo el partido, y sobre todo en los últimos minutos, los aztecas se cansaron de llegar y fallar. Santiago Fernández, Enrique Esqueda y Luis Ángel Landín erraron en varias ocasiones goles cantados, bueno hasta César Villaluz se dio el lujo de fallar un penal al minuto 77.
Fueron múltiples jugadas donde atacaban cuatro o cinco mexicanos con uno o dos haitianos defendiendo e increíblemente volaban los pases, la pateaban fuera o el arquero se las detenía a boca de jarro. La verdad fueron escenas dignas de una película de terror.
Bueno, terror se volverá a vivir si Luis Fernando Tena no es capaz de lograr el boleto a Londres 2012. La cita es el próximo fin de semana en el mismo lugar ¿Los rivales? Honduras, Panamá y Trinidad y Tobago. ¿Adversarios “a modo” otra vez?... Salvo los catrachos, los canaleros y los isleños deberán sucumbir ante los aztecas. Eso dice la teoría, sin embargo, Tena y sus jugadores no deberán confiarse el boleto a las olimpiadas se podría esfumar de nuevo.
Aunque la Selección de esta categoría viene de hacer un papelón en la Copa América ocasionado por las bajas del sexo-escándalo de Quito, en los Juegos Panamericanos se enchufaron muy bien y conquistaron la Medalla de Oro.
El delantero que anotó el único gol de la final ante Argentina, Jerónimo Amione del Atlante, está dentro de los convocados para este preolímpico que no contará con refuerzos, por lo que no habrá un Oribe Peralta que venga con su contundencia, pero creo que Amione, junto a los otros delanteros Alan Pulido de Tigres y Erick Torres de Chivas, sabrán colocar la pelotita en las redes.
Ya veremos, por lo pronto hoy sábado enfrentan en San Francisco, California a su similar de Senegal, en lo que será su último juego de preparación de cara al torneo preolímpico.
Hugo Torres es columnista de futbol de La Estrella de Tucsón, semanario en español del diario estadounidense Arizona Daily Star. Contáctelo al e-mail: detacosypatadas@azstarnet.com o síguelo en twitter.com/detacosypatadas
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