Cuando nos encontramos ya en la segunda mitad del Apertura 2012, la Liga MX nos sigue decepcionando por la falta de protagonistas, y sobre todo, por la falta de gol.
La pasada jornada fue una de las fechas con menos goles anotados en la historia de los torneos cortos, la sexta peor para ser específicos. En el pasado, se anotaron 14 goles en un par de ocasiones, 13 en otras dos y en la fecha cinco del Invierno 1996, sólo se marcaron 10 tantos.
Fueron solamente 15 goles los que se anotaron en esta novena jornada, que pudo haber sido peor de no ser por el duelo entre Monterrey y Querétaro, donde se registraron 5 aciertos en la victoria de Rayados por 3-2 sobre Gallos Blancos. En el resto de los juegos se marcaron dos, uno o cero tantos.
Esta fatídica fecha registró tres triunfos y seis empates. Además de la victoria de Monterrey, San Luis se impuso a Pachuca y Toluca a Atlante, ambos por la mínima diferencia y en las igualadas, cuatro terminaron a un gol y dos acabaron sin anotaciones.
En la semana leía un artículo que decía que éste torneo está sufriendo de una baja asistencia en los estadios, a pesar de todos los “esfuerzos” de la Federación Mexicana de Futbol y la nueva Liga MX. Yo me pregunto: ¿A caso esperaban un incremento de fanáticos con la “manita de gato” que se le dio a la liga?
Es obvio que la gente no es tonta. El nivel de competencia es muy pobre y para muestra, sólo basta un botón: la escasez de goles de esta jornada. Si el presidente de la Liga MX, Decio de María, quiere que la gente colme los estadios, se deben hacer mejor las cosas y no solo maquillar una liga que tiene mil y un problemas.
Dicen que para solucionar un problema, hay que arrancarlo de raíz. La gente que controla el futbol azteca –léase dueños de los equipos, y especialmente los de las televisoras– deben cambiar el rumbo y cederle el control a gente sin compromisos que pueda desempeñar su trabajo de manera autónoma.
El cambio debe comenzar por refrescar el organigrama de la Federación con caras nuevas, con gente de futbol exitosa, y no solo esos empresarios o políticos que son manejados como títeres y que solo viven para servir ciertos intereses, especialmente los económicos.
Si bien es cierto que las finanzas son importantes, también el aspecto deportivo es prioritario, es decir, si lo deportivo está por los suelos como actualmente está, ¿Cómo esperan altas ventas de boletos?
Y si a esto le aunamos las precarias condiciones económicas del País, pues estamos fritos. El aficionado de la mayoría de los equipos simplemente está decepcionado, no hay furor que le haga hacer un esfuerzo y comprar ese boleto, esa camiseta.
Es muy triste pero así es. Chivas construyó un estadio de primer mundo y nadie asiste. Y mire que el Rebaño Sagrado es el conjunto con mayor cantidad de aficionados en México y Guadalajara es la segunda ciudad más poblada del país. Entonces, ¿Dónde está la lógica?
Los dueños deben entender que hace falta espectáculo, que hace falta gol en las canchas, que el torneo es mediocre.
Pero no solo fallan los de arriba, también los de abajo, comenzando con los técnicos amarretes y terminado con un amplio sector de jugadores, quienes como auténticas divas, no dan ese “extra” cada semana y se la pasan disfrutando de las generosidades de sus exorbitantes sueldos, las pachangas y sus autos ostentosos.
Hugo Torres publica su columna de futbol mexicano en La Estrella de Tucsón del Arizona Daily Star y en el Imparcial de Hermosillo, Sonora, México. Contáctelo al e-mail: detacosypatadas@azstarnet.com o síguelo en twitter.com/detacosypatadas
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